Después de un viaje de 4 horas desde Oruro, Cochabamba nos recibió con un
lindo clima, bastante fresco combinada con la calidez de los focolarinos que
nos recibieron, almorzamos en el focolar.
En la tarde dimos una mano de jardinería y arreglo de las habitaciones que íbamos
a ocupar.
Empezaron a llegar los 8 Gen que se unirían a nuestros tres días de
"Working School", una escuela de vida Gen y trabajo social. Todos
juntos hicimos una revisión general del programa para estos días.
Antes de misa nos presentamos y comentamos un poco el porqué de nuestra
visita y el working school.
A la mañana siguiente el programa empezó temprano en el "Rincón de
Luz", un centro social del Movimiento de los Focolares que presta ayuda a
la gente del barrio, especialmente en refuerzo escolar de las materias a los
niños.
Leímos lo que el Papa escribió como preparación a la jornada mundial de los
Jóvenes y empezamos las tareas con esta idea: “Sus palabras son un “sí” valiente y
generoso. El sí de quien ha comprendido el secreto de la vocación: salir de uno
mismo y ponerse al servicio de los demás. Nuestra vida solo encuentra
significado en el servicio a Dios y a los demás.”
Podar plantas, subir a los techos, limpiar baños, hacer conexiones
eléctricas, armar cercas con palets, limpiar todas las paredes, pintar salones, arreglar el material para
los niños, etc... fueron las actividades realizadas, el trabajo fue arduo y con
gran felicidad de todos se entabló un dialogo entre los participantes.
La providencia no se hizo esperar en alimentos.

Al inicio muchos no nos conocíamos pero se creó una atmósfera de unidad que mas allá del cansancio por lo que hicimos, recibimos a los niños con gran amor y alegría.
me imagino como se sienten trabajo cansancio y satisfacción a la vez. que admirables los sigo h rezo por uds.
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